Nuestra historia

Los comienzos lo son todo…

valaria

Todo legado comienza con amor. 

Valeria Schnauzer nació de un vínculo—uno que empezó hace dieciocho años con una Schnauzer sal y pimienta llamada Taiga. Fue un regalo de amigos cercanos, hija de Nikita, nacida en un faro en la costa de Asturias. Su nombre vino del bosque siberiano: salvaje, silencioso y lleno de alma. 

Taiga fue más que una perra. Fue compañera, constante, y el inicio de todo. Una noche, mientras cenábamos con amigos, encontró el amor con un Schnauzer negro y plata. Dos meses después, en mi dormitorio, nació un solo cachorro: Gobi, llamado así por el desierto mongol. Tranquilo, sabio y profundamente conectado con nosotros. 

Cuando Taiga falleció hace tres años, Gobi quedó destrozado. Lloraba todo el día y no podía quedarse solo. Esa tristeza me llevó a buscar una nueva compañera—no para reemplazarla, sino para ayudar a Gobi a sanar. Encontré una criadora a menos de 3 km de casa, y llegó a nuestra familia una cachorra llamada Aspen—como el árbol que crece en los bosques de la Taiga. 

Durante dos años, Aspen aprendió de la serenidad de Gobi. Él había alcanzado una especie de nirvana canino—calmo, centrado y lleno de sabiduría. Ayudó a criar la primera camada de Aspen, transmitiendo su temple y presencia a la nueva generación. 

No criamos perros. Honramos el espíritu de quienes nos enseñaron a amar. 

Develop good behavior and strong bonds

Gobi ya no está con nosotros, pero su legado vive—en Aspen, en sus cachorros, y en el corazón de Valaria.

Grou
Cons
From Puppy Love to Lifelong Loyalty
Whether you’re seeking a loyal protector, a playful companion, or a gentle giant, we have the ideal pup waiting just for you.